Mantener informadas a las autoridades chinas sobre nuestro trabajo en publicaciones es algo esencial. Aquí le estoy dando al Sr. Liu una copia del Nuevo Testamento chino que acabamos de publicar.
Hace 17 años que trato con el Sr. Liu. Nos ha recibido siempre muy bien. Él es el responsable por parte del gobierno chino para la Iglesia Católica (algo así como “el papa chino”).
Nos acompañó el claretiano P. Francisco Carín, que reside en Beijing y
está terminando su tesis doctoral.