Missión de China -- Julio 2009

Evangelización en la base popular

El P. Pablo Zeng Haijun es un joven sacerdote chino. Ha sido profesor en el seminario durante algunos años y ahora tiene un nuevo destino. Hace tres meses fue enviado a una parroquia en la ciudad de Heyuan; la parroquia cuenta con 9 capillas que atender en el campo. Nos ha pedido y le hemos enviado 400 biblias chinas para sus nuevos parroquianos. Dejemos que él nos cuente su labor:

Esta es la Provincia de Guangdong en China. El distrito en color señala el lugar donde yo trabajo. La ciudad principal es Heyuan con una población de 210.000 personas. La mayoría de la gente pertenece a la raza Cantonesa y Hakka.

Templo parroquial en Heyuan, China

Estas fotos son de Heyuan. Yo suelo quedarme en este lugar.


Mi misión es preparar a líderes para que puedan guiar a la gente y enseñarles a rezar con la Biblia y lo esencial de la fe.

Todos los días les enseño canciones que les ayuden a memorizar frases bíblicas.

Generalmente tenemos unas 10 personas mayores que rezan y cantan todos los días en la iglesia. Luego los invito a que me acompañen a visitar a otros cristianos.

Las fotos que siguen son de Xiazhai Village, Dongyang.

En esta aldea no tenemos lugar de reunión.



Nos juntamos en la casa de algún cristiano para rezar y celebrar la Eucaristía.

Las fotos que siguen están tomadas en Litian Village, otro puesto de la parroquia.

En este pueblo al menos tenemos un lugar donde reunirnos.

Las siguientes fotos están tomadas en Zhongxin Town, Liangpin County. La iglesia tiene aquí una propiedad grande, pero ha sido confiscada y ahora se utiliza como centro de granos.

Justify FullEstamos tratando de recobrar esta propiedad que pertenece a la iglesia. De momento bloqueamos la entrada y utilizamos dos habitaciones para formación de catequistas. Aquí tenemos unos 200 cristianos. Y queremos recobrar otros dos lugares que pertenecen a la iglesia.

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El P. Pablo concluye con estas líneas:

Estimado P. Alberto Rossa

Soy el P. Pablo Zeng Haijun. Muchas gracias por su ayuda. Ya hemos recibido los 400 ejemplares de la Biblia Pastoral china. Muchas gracias de corazón; no le podemos ofrecer nada pero creemos que Dios le dará mucho más de lo que usted nos ha compartido. Vamos a rezar con mis parroquianos por su apostolado con la Palabra de Dios.

Esto es lo que estamos haciendo para hacer crecer la fe de nuestros cristianos:

Primero, les enseño canciones y les explico el significado de la letra. Las canciones hablan de historias de la biblia, especialmente de las enseñanzas de Jesús. Les hago cantar con atención estas canciones para que les llegue al corazón y les ayuden a motivar su vida.

Segundo, les cuento historietas bíblicas; son historias que ayudan a vivir bien. Pero el tiempo de que dispongo para cada lugar es limitado, por eso les enseño a leer la Biblia y a orar con la Biblia. Como ahora tienen una biblia para cada familia ellos pueden hacer esa lectura orante en sus casas.

Tercero, es importante hacerles memorizar los pasajes bíblicos más importantes. Les enseño esto con canciones y una frase bíblica por día. Les invito a poner en práctica la enseñanza de Jesús en sus vidas diarias.

Por último, lo más urgente es preparar evangelizadores. Me lleva un mes entero visitar a todos los centros. Lo que hago es entrenar a catequistas que puedan ser enviados a las diferentes aldeas. Sé que hay muchos que están dispuestos a hacerlo y solo necesitan un poco de entrenamiento.

Nuevos rumbos de Vida Consagrada en China

Nuevas situaciones llaman a soluciones nuevas.
Bajo la guía experta del Claretiano P. José Cristo Rey García P.,
un grupo de religiosas se juntaron en nuestra casa
de Wanzai, China para discernir la llamada del Espíritu
en sus vidas. Aquí tienen algunos recuerdos de este encuentro:

Eucaristía presidida por el P. Cristo Rey

Conferenciante en acción ...

La sala de reunión

Mesa abundante… comida china, ¡naturalmente!

Los participantes con el P. Cristo Rey y Alberto

Dos misioneros gigantes...

P. Luis Ruiz sentado y P. Thomas Peyton en la extrema derecha

El P. Luis Ruiz tiene 97 años y el P. Thomas Peyton está pisando los 80.

A sus 97 años, el misionero jesuita Luis Ruiz atiende 145 leproserías en China Nació en Gijón, le expulsó de España la Segunda República, impartió clases a Fidel Castro en Cuba, y le encarceló la China comunista. Pero ha sobrevivido a persecuciones y enfermedades siempre al servicio de los demás, salvando a miles de personas de la exclusión social absoluta.


“Lo que más necesita un leproso es que le traten con cariño”

El Padre Luis Ruiz Suárez ha pasado prácticamente toda su vida lejos de España y al servicio de los demás. Un día, cuando él contaba con 73 años, alguien le comentó que unos leprosos trataban de sobrevivir sin ayudas en un lugar recóndito entre las montañas de China. Han pasado más de veinte años, y este misionero preside las 145 leproserías más reconocidas del país, donde se atienden a más de 100.000 enfermos. “Y todavía queda mucho por hacer”.

Puedes leer más en:



Si buscas en la web y escribes el nombre del
P. Luis Ruiz encontrarás sitios como éste:

“Los Ángeles viven en aldeas chinas”

Expedición al interior de China del P. Jojo Ancheril

El P. Jojo acaba de regresar de un viaje misionero al interior de China. Estuvo visitando la región llamada Ngjau en la provincia de Guangdong.


No es la primera vez que te adentras en China… ¿qué diferencia hubo esta vez?


Ya he visitado varias ciudades grandes en China, pero esta vez tuve la oportunidad de adentrarme en aldeas retiradas de la Provincia de Guangdong. Es la primera vez que alguien me acompaña a lugares tan remotos.

Cuéntanos algo más sobre estas aldeas.

Estuve en la region llamada Ngjau. Estas aldeas están a 5 horas de la ciudad. Algunas aldeas están en terreno montañoso. Lo que más me llegó fue la actitud de acogida de la gente de la región.

Y ¿cómo son la gente de ese lugar?

La gente es muy generosa y humilde. La mayoría son campesinos y trabajan la tierra desde la salida del sol hasta el ocaso. Comparten entre ellos lo poco que tienen.

Vemos en las fotos que hay muchos niños…
supongo que les habrás hecho un poco de magia.

La verdad es que me sorprendió ver familias con muchos niños; la mayoría de las familias tienen 8 ó 9 miembros. Visitamos unas 40 familias y en todos los lugares nos recibieron con los brazos abiertos. Los niños vinieron enseguida a jugar con nosotros. Me sentí muy a gusto con ellos con mi podre cantonés.

¿Qué es lo que más te gusto de este viaje a China?

Pasamos cuatro días con ellos – rezamos juntos, jugamos juntos, comimos juntos, caminamos juntos, etc. Para mí fueron los días más felices en China. Cuando tenga oportunidad de regresar lo haré con muchísimo gusto, aunque las distancias son muy grandes y las dificultades también enormes. Este viaje me ha ayudado a percibir que los Ángeles viven en estos remotos lugares de China.

Nuevo destino: La Misión de China

Bienvenido P. José Cherukara

El P. José a su llegada a Macau

El P. José nos da su primera impresión:

Macau – ¡el nombre resuena en mi memoria desde los años de catecismo! Por supuesto que nunca imaginé que un día podría estar en este hermoso lugar. San Francisco Javier, el segundo apóstol de la India, estuvo en estas cercanías y luego de su muerte los huesos de su brazo fueron trasladados al la iglesia del seminario de San José aquí en Macau. Por todo esto el nombre de Macau es muy familiar para mí. Cuando llegué a Macau sentí que estaba haciendo una peregrinación.

Frente a la fachada de las Ruinas de San Pablo

Macau es un lugar hermoso, una ciudad cosmopolita. Es impresionante ver todos los nuevos edificios, especialmente los edificios muy modernos de los casinos. Con menos de 30 kilómetros cuadrados y una población de 546.200 habitantes, Macau tiene un promedio de 27 millones de turistas todos los años. Pero mi paso por Macau es solo temporal. Dentro de unas semanas comienzo mis estudios de la lengua cantonesa en la universidad en Hong Kong. Son dos años intensos como base, después Dios dirá. El celo misionero de Francisco Javier y el amor por la Palabra de Dios de San Antonio M. Claret continua impulsándonos a lanzarnos a esta misión de frontera.

Con Alberto y Jojo

Nos escribe:


El cardenal Gaudencio Rosales, Arzobispo de Manila:

¡Me alegro por las buenas noticias que cuentan sobre los Filipinos/as en Macau! Ojalá que sean una Bendición para aquellos con quienes y por quienes trabajan. Que sean una Bendición para ellos mismos permaneciendo fieles a su fe y amor a Dios en Jesús.

+ GBRosales

¿Quién no necesita un abrazo?

Oso polar: ¡Vengo en son de paz!

Norbert Rosing captó estas imágenes en Hudson Bay, Canadá.

El fotófrafo estaba convencido que iba a presenciar
el fin del perro al ver acercarse el oso.

Resulta sorprendente ver que lo que
el oso polar quería simplemente era abrazar a alguien.

Durante varios días regresó el oso polar a jugar con los perros.

Que siempre tengas amor para compartir,
Salud para dar,
Y amigos que cuiden de ti.