Jojo y su Cantonés

Nuestra comunidad es un poco especial. Somos tres misioneros, pero solemos estar dispersos y nos juntamos cuando podemos. El P. Jojo Ancheril reside habitualmente en Hong Kong y está estudiando el difícil idioma cantonés.

Nos escribe:

Estoy terminando el cuarto semestre de estudios del cantonés y me siento contento y satisfecho. Lo que más alegría me da es que ya puedo celebrar la Misa y administrar los sacramentos de la Reconciliación y Unción de los Enfermos en idioma cantonés. Siento profundo gozo cuando gente con el corazón roto se acerca a los sacramentos y yo con mi cantonés “roto” les puedo dar un rayo de esperanza. Últimamente me ha tocado tratar a gente de las más diversas capas sociales y siempre que les puedo ayudar me deja muy feliz. A veces me siento como el padre en la parábola del “Hijo Pródigo”. ¿No son acaso los momentos más gratificantes para un sacerdote cuando uno es instrumento del perdón de Dios a un corazón arrepentido? Doy gracias a Dios por tener esta oportunidad. Por supuesto que el cantonés es muy difícil, pero estas experiencias me ayudan a ser más persistente y fiel. GRACIAS, de todo corazón, a los que me ayudan y animan en esta tierra prometida que es China.