Comundad Claretiana Hong Kong-Macau con el Vicario de Macau
(Iz) José, Peter, P. Pedro Chong, Vicario de Macau, Alberto, Ezakías, Jojo
Al decir del claretiano Mons. Pedro Casaldáliga: “Una Iglesia que se olvida de sus mártires, no tiene derecho a sobrevivir”. Nuestros mártires de 1936 entregaron sus vidas jóvenes por ser fiel a Jesús y a su Iglesia. Su memoria nos ayuda a llevar el mensaje del Evangelio en estas fronteras.
Uno de esos mártires, Rafael Briega, de 24 años, estudió chino por su cuenta y escribió en chino a los misioneros que estaban en China en 1936. Dejó escrito:
“No puedo ir a China como lo hubiera deseado, pero estoy dispuesto a ofrecer mi sangre por la misión de China, y cuando llegue al cielo no me olvidaré nunca de rezar por esta misión”.
Otro mártir Claretiano, Flaviano Martínez, de 24 años, escribe a sus familiares:
“Quizás oigan algún día que su hermano Flaviano está en China… luego podrán escuchar que ha perdonado a sus ‘enemigos’ y que ha dado su vida por Cristo. Si esto sucediese sería mi más grande alegría”. También publicamos en chino y repartimos a toda la gente que nos acompañó un folleto de 36 páginas titulado (en chino) Misioneros Mártires.
Parte de la celebración en recuerdo de los mártires fue una peregrinación por Macau hasta la misma frontera con China, para manifestar nuestro compromiso y disponibilidad misionera especialmente para la misión en China.
En solidaridad también con el Día de la Misión Claretiana Mundial hemos podido recoger y enviar US$3.000 para la construcción de una escuela en Camerún, África.
Aquí tienen algunas fotos de los encuentros en estos tres días de celebración Claretiana.